Río San Juan.- El equipo representativo de la comunidad de Abreu se llevó la copa de campeón de la novena versión del Clásico de Softbol Luis Hernández, celebrado el fin de semana en este municipio.
Seis equipos participaron en la jornada que inició la tarde del sábado en el recién remodelado estadio Garabato Sackey, con una ceremonia inaugural en la que el dirigente deportivo Luis Hernández dio las gracias por el apoyo a dicho evento en su novena versión y destacó la importancia de su celebración.
Luego, los representativos de Cabrera, Abreu, Payita, Gaspar Hernández, El Factor y Río San Juan se enfrascaron en una lucha por la copa Presidente, donada por la Cervecería Nacional Dominicana, quien también tuvo a su cargo la remodelación del estadio.
Las novenas de Abreu, Cabrera, Payita y Gaspar Hernández, tomaron la delantera en los partidos de clasificación celebrados el sábado, pasando a la serie semifinal al siguiente día.
El domingo las hostilidades iniciaron en la mañana, con partidos de muerte súbita entre los combinados de Abreu y Gaspar Hernández.
Ni la llegada de algunos de sus fanáticos en un helicóptero que aterrizó en pleno terreno de juego durante la celebración del partido impidió que los gasparenses fueran derrotados por los muchachos de Abreu, que desde ya mostraban su decisión de llevarse la corona.
Luego vino la lucha entre Payita y Cabrera, con los primeros llevándose la mejor parte, para dejar definido quienes serían los que se enfrentarían en la final por la codiciada copa.
Así, con amenazas de lluvia llegó la batalla final. Abreu y Payita se enfrentaron en un mano a mano que solo se detuvo por un momento a causa de la llovizna, para luego continuar con más brío, hasta que los muchachos de la comunidad perteneciente al pujante municipio de Cabrera alzaron la copa de campeón.
El cierre fue espectacular. Antes de la ceremonia de entrega de los trofeos a los ganadores y ante un estadio completamente lleno, vino el colirio para los ojos de los hombres: par de encuentros femeninos entre Río San Juan y Cabarete, y aunque los locales cayeron en sentidos partidos, el deleite fue celebrado por todos los presentes.
Un aterrizaje en pleno estadio en medio de celebración de partido