En la sociedad existe una gran confusión sobre lo que significa ser un antisocial, la mayoría erróneamente interpreta que este término se refiere a personas que prefieren la soledad y el aislamiento. Pero en realidad un antisocial es una persona que no respeta normas, reglas y que no tiene la capacidad de colocarse en el lugar de los demás. (falta de empatía).

De manera frecuente oímos que cuando alguien es retraído, llamarle antisocial, aunque en realidad es una persona tímida, introvertida o que está dentro del espectro autista, aún sea de manera muy leve. Los que padecen esa condición son calificados de manera equivocada de raros, psicorígidos y antisociales.

En realidad, es todo lo contrario de lo que se piensa sobre este tema, ya que el Trastorno de la Personalidad Antisocial (TPA), se refiere a aquellos que no se ajustan a las normas sociales y que tienen muy poca empatía. Para comprender mejor lo que establecemos, vamos a dejar los términos técnicos usados por la DMS Y OMS y vamos a ilustrar con algunos ejemplos prácticos que vemos a diario.  

Como identificamos a las personas con el Trastorno de la Personalidad Antisocial.  De manera muy simple: veamos algunas manifestaciones de las personas con el TPA en el diario vivir.

1ro.  No son capaces de someterse a la disciplina de cualquier equipo deportivo, peleando constantemente con los demás jugadores y enfrentado al maneger, así como siempre estar protestando las decisiones de los árbitros. Son los llamados GUERRILLEROS.

2do. Estas personas se pelean con todos los miembros de la familia, padres, hermanos, abuelos, primos etc. Se convierten en un tormento, que hace muy difícil la vida familiar.

3ro. Aunque pueden conservar algunos amigos, siempre y cuando estos se sometan a sus manipulaciones, el ambiente de contratiempos y discusiones es lo habitual.

4to. En la escuela por lo general irrespetan a los profesores, siendo sancionados y llamados a la dirección con mucha Luz frecuencia.

5to. En lo laboral se les hace difícil mantenerse en algún trabajo por mucho tiempo, teniendo que optar por trabajos independientes, donde no se les exija un cumplimiento estricto de horario y respeto a las normas.

6to.  En el lugar donde viven, siempre tienen problemas con los vecinos, ya que hablan y griten de manera molestosa. Además, suelen oír música con un alto volumen, sin importar la hora, por lo que en muchas ocasionas son obligados a abandonar el lugar.

7mo. Cuando están en un sitio público, quieren imponer sus caprichos, por lo que pueden tener dificultad con los que están en su lugar o con los propietarios del establecimiento.

8vo. Si llega a estar en algún internado cuando va a la Universidad, en cualquier circunstancia crea un caos, por música alta o gritos, recibiendo la repulsa y rechazo de todos los miembros de esa comunidad.

Estos son sólo algunos ejemplos de lo que es una persona con el TPA, lo que los hace seres muy difíciles de compartir y convivir. Con el tiempo y en la medida que maduran, pueden llegar a mejorar su comportamiento, para evitar el rechazo y el aislamiento social.

Aunque mi recomendación a las personas con este trastorno, es que busquen ayuda profesional, para que con terapias, pueden mejorar su condición y convivir en una sociedad, que tiene normas y reglas, pero que su falta de empatía, les impide aceptar y comprender.