Río San Juan.- Pesar, incredulidad y decepción ha causado en el pueblo riosanjuanero la situación que enfrenta su compueblano Emmanuel Clase, el gran cerrador de los Guardianes de Cleveland, quien el pasado domingo fue formalmente acusado en una corte de Nueva York de asociarse con apostadores para vender sus lanzamientos.
Y es que Clase se había convertido en la gran esperanza de ver cumplido el sueño de los riosanjuaneros de tener un digno representante en las Grandes Ligas, tras sufrir grandes decepciones en el pasado con figuras como Ramón Caraballo, Robinson Pérez Checo y Fernando Martinez, entre otros, quienes llegaron con grandes espectativas a la Gran Carpa, pero no pudieron decollar como se esperaba y rápidamente vieron sus carreras terminar de manera efimera en el mejor beisbol del mundo por su pobre desempeño.
En el caso de Clase es diferente, el riosanjuanero ha sido tres veces All-Star y dos veces Relevista del Año de la Liga Americana; tenía un salario de 4,5 millones en 2025, la cuarta temporada de un contrato de cinco años por 20 millones.
Incredulidad y decepción
“Río San Juan se encuentra totalmente devastado, porque eso puede descencadenar una situacion que saque a Emmanuel de todo el beisbol organizado”, reaccionó el popular dirigente deportivo riosanjuanero Luis Hernández.
“Nosotros desde hace muchos años hemos tenido la mala fortuna, si se puede llamar así, de no poder establecer un jugador de beisbol (en Grandes Ligas) de nuestro municipio. Con Emmanuel Clase nosotros ya nos sentíamos representados y de qué manera”, agregó en declaraciones al programa Revista Deportiva de la cadena de TV CDN.
Alegatos de Clase
Explicó que tras surgir la primera informacion tuvo la oportunidad de convenzar con Clase, que el propio pelotero le puso el tema. “Me dijo que queria indagaran hasta lo más profundo, porque él estaba limpio”.
“Incluso me enseñó en su telefono unos reportes de llamadas que él le hacia a Elvis Alvarez, (su amigo de confianza) donde él preguntaba sobre gallos. (Todos sabemos aqui que Emmanuel como muchos peloteros le gusta jugar a los gallos)”, dijo.
“Me explicó que ellos (las Grandes Ligas) lo que entienden es que cuando yo llamaba a Elvis y le preguntaba como le habia ido en los gallos era una llamada en clave, y yo obviamente le enviaba dinero a él para que me le diera cuidado y alimentación a los gallos, y me honrara otros compromisos”, dijo Hernández.
Expresó que su conversación con Clase ocurrió tres días antes de darse a conocer la presentación de cargos.
Incluso que el sábado había conversado con Alvarez quien le dio un recado de Clase de que estaba preparando un equipo de softbol de Cabarete, Sosúa, donde el lanzador fue firmado, para enfrentarlo a una selección de Los Compadres de Río San Juan, equipo cuyo mentor es el propio Hernández.
Dijo también que el domingo por la mañana se vio el vehiculo de Clase circulando en el pueblo, lo que indica que aún peermanecía en Río San Juan. La nota sobre la acusación salio en horas de la tarde de ese mismo día.
Aunque no pudo confirmar, Hernández dijo conocer que Clase tenia programado viajar este lunes o martes hacia los Estados Unidos para enfrentar la acusación.
Junto al riosanjuanero también fue acusado el lanzador Luis Ortiz, de quien los fiscales dicen fue reclutado por Clase para confabularse con los apostadores, algunos de los cuales dicen residen en la República Dominicana.
Ortiz fue apresado en un aeropuerto de Boston el domingo y este lunes fue presentado formalmente ante un juez, quien tras explicarle los cargos le impuso una fianza de $500 mil dólares, monto que el pelotero maeño pagó.
Regla de Grandes Ligas
La Major League Baseball (MLB) prohíbe a jugadores, entrenadores, árbitros y empleados realizar cualquier tipo de apuesta relacionada con el béisbol. La norma, conocida como Regla 21(d), establece dos niveles de castigo:
Apuestas en partidos no propios: suspensión por un año.
Apuestas en partidos en los que el jugador participa directa o indirectamente: suspensión de por vida.
La redacción original, adoptada tras el escándalo de los "Black Sox" en 1919, no ha sido modificada en su esencia. Sin embargo, la era digital y la irrupción de plataformas legales de apuestas deportivas han obligado a MLB a crear protocolos de vigilancia tecnológica.






