Río San Juan.- Decenas de estudiantes de los barrios de Acapulco y Nueva York Chiquito exponen diariamente sus vidas diariamente cruzando a través de un improvisado cruce de madera rústica un pestilente pantano para acudir a las respectivas escuelas de la zona.
Los estudiantes, en su mayoría niños menores de 11 años, deben pasar por el peligro cruce para acudir a las escuelas Gregorio Luperón y Gloria Altagracia Bidó, esta última construida hace un par de años.
Igual recorrido tienen que hacen las personas que realizan labores de pesca por la playa de los barcos.
Residentes de la zona dijeron que se vieron precisados a construir el rústico cruce, porque en varias ocasiones le han pedido al alcalde Alberto Alonzo la construcción de un puente peatonal, pero que hasta el momento no han recibido respuesta.
Explicaron que la otra alternativa que tienen es cruzar por el peatonal que separa los barrios de Buenos Aires y Acapulco, pero que se encuentra muy distantes.
Pidieron de las autoridades competentes ponerle atención al peligro que a diario enfrentan tanto ellos como sus niños, al cruzar dicho pantano, el cual se encuentra infestado de bichos de todo tipo, producto de los desperdicios y materias fecales que van a parar al mismo.






