Río San Juan.- En una demostración de que los dos o tres días de pataleo y “preocupación” por la posibilidad elección del regidor Miguel Martínez como presidente de la Sala Capitular solo existía fuera de la alcaldía, tla mayoría de sus compañeros regidores que componen el Concejo lo escogieron este viernes para que los dirija en el próximo año legislativo 2019-2020.
A pocos minutos de haber iniciado la sesión Martínez ya estaba juramentado y sin ningún tipo de objeción.
El miércoles salió a relucir la información de que algunos munícipes mostraban su preocupación de que éste ocupara la presidencia del Concejo, y hasta lo descartaban para la posición. Para ello lo acusaban de no hacer vida en el pueblo, porque presuntamente residía en Santo Domingo, también no de asistir a las sesiones y de ni siquiera estar al tanto de las diferentes situaciones que se presentaban en el cabildo. Incluso insinuaron de que realizaba algunas acciones negativas que lo descalificaban hasta para ser regidor.

Martínez salió al frente de esas denuncias, dijo que estaba confiado en que se iba a juramentar como presidente del Concejo, e instó a quienes supieran algún acto en su contra que lo invalidaran para el cargo a que lo denunciaran. Aunque también dijo que no temía a nada porque no tenía cola que le pisen.
Esta viernes, esa turbulencia mostrada el día anterior ni siquiera se sintió en la Sala Capitular, y tras tres votos a su favor, Martínez, con toda la solemnidad que caracteriza a este tipo de actos, fue juramentado presidente del Concejo Municipal con todo su protocolo y sin peros visibles, en un salón callado y con poco público.
Al final, una Arabella Martínez, presidente saliente, tomó el juramento a Miguel, quien se mostró satisfecho y alegre al decir "yo juro".
Arabella será la vicepresidente y Sunilda Hernández, vocera.
En su discurso, el nuevo presidente agradeció su elección y se comprometió a trabajar con esmero y dedicación para continuar el desarrollo del municipio.






