SANTO DOMINGO.– El estratega gubernamental Jorge Lendeborg, renunció este lunes a sus funciones como asesor político del candidato presidencial por el Partido de la Liberación Dominicana (PLD), Abel Martínez, alegando dificultades y trabas para poder ejercer con sus responsabilidades.
Lendeborg fue designado como asesor en la campaña de Martínez hace más de 40 días; informó que es difícil e inaceptable poder laborar con un aspirante que a la misma vez viene ejerciendo como su propio jefe de campaña e incluso como asesor y estratega político, cosas que impiden que se pueda cumplir con los objetivos establecidos para poder lograr la victoria.
“Ese método de trabajo establecido no compagina conmigo, esto porque un proyecto se hace bastante difícil trabajar con un candidato que quiere ser su propio jefe de campaña, de estrategias y con diferentes planes a la misma vez, por lo que entiendo lo correcto sería trabajar con efectividad y bajo una sola línea, es decir debe existir un sólo plan y trabajar todos en la misma dirección. Por esta razón es que comprendí que no estoy dispuesto a perder mi tiempo”, dijo el estratega.
De igual forma añadió que un proyecto sin proyección, habilidad, métodos, procesos, comunicación efectiva y sin recursos, es imposible que pueda avanzar. «Estos y otros factores me llevaron a renunciar y declararme agente libre”, añadió Lendeborg.
El estratega político manifestó que “su salida del proyecto se debe a estar convencido de que el propio candidato del PLD, no está interesado en librar una verdadera batalla”.
Añadió que la Fuerza del Pueblo sólo tiene un proyecto y una agenda: «Leonel 2024». Asimismo enfatizó que el proyecto de “Abel2024” no está bien estructurado, ni comprometido con el mismo.
“El proyecto Abel2024 choca con esos intereses, incluyendo al propio candidato Abel Martínez, quien está más enfocado en mantenerse con el menor costo y esfuerzo en el 2024, para resurgir como posible candidato en el 2028, sin darse cuenta de que no hay un 2028 para nadie en el PLD”, expuso.
Lendeborg argumentó entre otras cosas, que «para que una campaña tenga éxito se hace muy necesario que se cumplan importantes factores, el más significativo de todos: “que quien la dirija pueda contar con la entera confianza del candidato».






