Viktor Frank en su obra “El hombre en busca de sentido”, nos establece que el ser humano debe hallar su propósito en la vida, teniendo como soporte nuestro ser interior. En esa obra, el autor nos narra desde el punto de vista de la psicología, su experiencia en los 3 años que duró en un campo de concentración nazi por el simple hecho de su origen judío.
Viktor Frank fue un prominente psiquiatra, creador de una visión nueva en el campo de la psiquiatría conocida como “Logoterapia”. El hombre en busca de sentido, ha sido uno de los libros mas vendido de todos los tiempos, considerándose entre las 10 obras mas influyente de Estados Unidos.
Al igual que Viktor Frank considero que para toda persona es vital encontrar su propósito en este mundo, tener consciencia de que es lo que quiere, que en definitiva es lo que nos dará la fuerza interior para vivir y disfrutar de la vida en cualquier circunstancia. Es lo que nos dará la fuerza emocional y espiritual, para disfrutar los momentos alegres y superar los difíciles y tristes que nos presenta la vida.
Por esto es muy importante comprender las diferentes etapas que conforman el período de tiempo que nos corresponde vivir en nuestra existencia. Los propósitos no siempre son los mismos, varían de acuerdo al transcurrir de los años, aunque la actitud nacida de nuestro interior siempre será la misma.
El multimillonario chino Jack Ma, fundador de Alibaba, con gran sabiduría hace una excelente interpretación de la vida, las etapas y los propósitos. Nos dice que de los 20 a los 30 años, el ser humano debe buscar un mentor de quien aprender, trabajar con alguien que lo inspire, enseñe y motive, sin poner en primer plano el salario, sino la oportunidad de aprender.
Jack nos refiere, que de los 30 a los 40 años, es un periodo en el cual se debe definir lo que se quiere y se busca en la vida. De los 40 a los 50 años, es una etapa de consolidarse en lo que ha elegido como prioridad, ya que en este periodo no es recomendable realizar cambios. De los 50 a los 60 años, nos dice que es una década para dedicarla a enseñar a los jóvenes, de trasmitir las experiencias y sabiduría ganada en el tiempo.
Después de los 60 años según el sabio y exitoso millonario chino, debemos irnos a la playa, jugar con los nietos, dedicarle tiempo a los hijos, compartir con los amigos verdaderos, conocer y aprender cosas simples, viajar hasta donde sea posible. En resumen, para el millonario chino, debemos disfrutar y vivir en libertad, los últimos años de nuestra existencia con el menor estrés que la circunstancias nos permitan.
Si no asumimos esa actitud después de los 60, para que habrán servido décadas de trabajo, sacrificios y dedicación para crear un patrimonio familiar. Para que otras generaciones sean sus beneficiarios?, porque sencillamente se nos hizo tardar entender esta realidad y ya los achaques, enfermedades y dolencias propias de la edad, sólo nos permiten contemplar, con un bastón o una silla de ruedas, nuestra majestuosa obra de décadas de trabajo.
En días pasados un amigo y experimentado médico, me dijo que debía ponerme como meta un nuevo proyecto, para canalizar mis energías e impedir que la ansiedad me asaltara, ya que después de más de 45 años de desarrollar una vida activa e intensa, el retiro era muy difícil de manejar.
En verdad es muy difícil el retiro de la vida laboral, y en mi caso todavía es más complicado, ya que se produce al mismo tiempo de mi retiro de la actividad política, la cual había mantenido de manera continua desde mi adolescencia. Pero como dice Jack, para cuando lo dejaré?, hasta cuando esperaré?, sencillamente ya no hay tiempo, por lo que para la playa cada vez que sea posible.
Las estadísticas nos dicen que las personas cuando se jubilan, tienden a caer en depresión y ansiedad, enfermando y muchas veces muriendo por no adaptarse a vivir fuera de la actividad laboral. Les digo que es posible hacer la trasferencia y vivir a plenitud la vida, siempre y cuando asumamos una actitud de elegir nuestro destino en la última etapa de nuestra existencia.
Al amigo médico que me sugirió lo de crear un proyecto nuevo; le dije que ciertamente ya había elegido un propósito, el de cada día hacer algo diferente, el de redescubrir la vida: ELPROPÓSITO DE LA AVENTURA.