NUEVA YORK.- El vicepresidente nacional del PRM, doctor Eddy Olivares, vino la semana pasada a esta ciudad e intervino la seccional “Winston Arnaud Guzmán” luego que el pasado jueves 21 de noviembre se armara un lío en el local durante una reunión a casa llena, que terminó de manera muy violenta. Ver: https://www.youtube.com/watch?v=p81XOzJoMRo
Olivares pernotó durante cinco días en la Gran Manzana, reuniéndose por separado con altos dirigentes, entre ellos Yulín Mateo, presidente de la entidad; John Sánchez, secretario general; Neftalí Fuerte y Alejandro -Tontón- Rodríguez. Asimismo, con el cónsul Jesús -Chú- Vásquez y el doctor Rafael Lantigua, entre otros.
En la reunión de este pasado viernes, a la que no asistió el cónsul, Yulín Mateo, como presidente de la entidad, dio la bienvenida. Hablaron 37 compañeros durante 3½ horas. Hubo acusaciones y contraacusaciones entre los grupos que existen en la seccional.
Llegó el turno de Olivares. Con su tranquilidad y parsimonia habitual, saludó casi a todos. Luego, un silencio sepulcral. Inició advirtiendo lo que definió como una traición, usar las redes sociales para denigrar, insultar y acosar compañeros del partido. Se enfocó en el daño que se le hizo a la imagen del partido con el reciente problema suscitado en este local.
Luego de su monserga a los presentes, Olivares estableció medidas “hitlerianas” a los perremeístas en la Gran Manzana. 1- Ordenó depositar los celulares en una caja para no grabar el encuentro. 2- El que no lo hiciere tenía que salir de la reunión. 3- Advirtió a los fanáticos de usar las redes que hacer (grabar) otra vez imágenes como las recientes, serán expulsados de la organización, citó varios nombres de perremeístas.
4- Se prohibió promover aspiraciones presidenciales dentro de la seccional. 5- El doctor Lantigua y Luis Ducasse (ambos ausentes) fueron integrados al staff de la dirección, el reputado y valorado médico como presidente Ad Hoc.
6- La actual directiva: Mateo, presidente; Johanna Miranda, Altagracia Soldevila, Juanita Martínez, Marilú Fermín, como vicepresidentas; y John Sánchez, secretario general, entre otros; de ahora en adelante, cualquier decisión política que vayan a tomar debe ser debatida y aprobada por todos.
El doctor Olivares recordó el daño que la indisciplina le hizo al partido madre -PRD-, al grado de perder una elección ganada en 1986, y mantenerlos fuera del poder por años.