La adicción es una enfermedad crónica que tiene una serie de signos y síntomas específicos, los cuales manifiestan un habito que domina la voluntad de las personas; así como una dependencia a una sustancia, actividad o relación. La adicción controla los pensamientos y comportamiento del individuo, llevándolo a conductas impulsivas e irresistibles, las cuales pueden perjudicar la calidad de vida de esa persona, ya sea en el trabajo, actividad académica, relaciones sociales, familiares y de pareja.
Existen infinidad de adicciones que de una manera u otra afectan al ser humano, entre las que podemos citar las siguientes: adicción a las drogas, el alcohol, el tabaco, juegos o ludopatía, sexo, pornografía, comida, compras, juegos electrónicos o tecnofilia, al trabajo, al dinero, al, poder, ejercicio, violencia, internet, televisión, al chisme, café, al reconocimiento o aprobación social, a los celos, posesividad, preocupación, odio, envidia, etc.
En principio siempre se tiene la apreciación de que cuando se habla de adicción se habla de drogas, lo cual es totalmente incorrecto, ya que el listado que hemos presentado es solamente una parte de todas las adicciones que existen, por lo que podemos resumir el término adicción a la incapacidad para controlar la mente, convirtiéndose el adicto en esclavo de su propia mente, cuando se trata de dominar su voluntad.
Para tener una comprensión más práctica de este síndrome, vamos a definir en que consisten algunas de las adicciones que hemos anunciado. La adicción a las drogas es la actitud de consumir cualquier estupefaciente de manera continua e incontrolable, de la misma manera que la adicción al tabaco. A diferencia del alcohol, el cual se convierte en una adicción cuando la persona siente la necesidad de consumirlo constantemente, porque de lo contrario su organismo se lo pide para sentirse bien, esto no se puede confundir con el trago social y la cerveza para compartir.
La adición al juego o ludopatía, es una de las peores adicciones, pues genera inestabilidad familiar, de pareja y problemas que pueden llevar a cualquiera hasta el suicidio. La adicción a las compras o comprador compulsivo, la cual crea graves problemas económicos, ya que el adicto solo se siente bien comprando, aunque no lo necesiten y lo van acumulando. Tenemos el adicto al dinero o avaro, el cual su único objetivo es acumular dinero, olvidándosele disfrutar de la vida, por lo que las siguientes generaciones en definitiva son los que vienen a disfrutar la fortuna que lograron acumular.
El chisme aunque usted no lo crea es una adicción como cualquier otra, es una enfermedad crónica, que se manifiesta con el estilo clásico que lamamos "lleva vida", magnificar las cosas, emitir criterios sin base ni fundamentos, esas personas son muy peligrosas, porque son capaces de crear y provocar diferencias donde en realidad no existen. El adicto al reconocimiento o aprobación social, son las personas que si no reciben aplausos, reconocimientos y aceptación de la sociedad, se deprimen, por lo que tratan de buscarlo a como de lugar. La adicción al café o cafeína es muy frecuente en nuestra sociedad, por eso podemos oír a cada momento la frase, de que si no bebo café me duele la cabeza.
La adicción a la violencia es muy especial, porque es una enfermedad que puede empujar a la persona adicta a cometer actos violentos en cualquier momento, tanto físicos como verbales. El adicto a la violencia no tiene la capacidad de ver la vida de manera positiva, sino que siempre entiende que la solución de todos los problemas es a la fuerza y violentamente. La adicción al perfeccionismo, es lo que llamamos psico-rígidos, que siempre ven la vida en blanco y negro, que no entienden que el mundo no es perfecto, que la perfección es una idea impracticable,, porque la vida simple y sencillamente es imperfecta.
Para no hacer tan extenso el articulo, les prometo que en otra entrega seguiré definiendo otros tipos de adicciones, por lo que concluyo con la siguiente pregunta: ¿Es usted adicto a algo?