El “negocito” de la extorsión y el chantaje con el uso de los medios de comunicación masiva en el país está tomando un derrotero dañino y muy peligroso, al que la sociedad toda debería ponerle atención. Es un tema que los propios afectados, y los comunicadores que actúan con ética y no se prestan a ese tipo de vagabundería, tienen como muy espinoso, llegando incluso a la autocensura. Se le tiene cierto temor a los que usan su acceso a los medios para extorsionar y chantajear, sin tomar en cuenta que se está dejando abierta una pendiente enjabonada para que quien quiera difame e injurie, utilizando mentiras, medias verdades y mucha maldad. Los beneficios que esta mala y perversa práctica está reportando a quienes la ejercen como herramienta de “búsqueda” son muchos y diversos. En la generalidad de los casos, se persiguen pagos por debajo de la mesa por montos inimaginables, aunque hay quienes buscan los famosos “intercambios” y/o pagos en naturaleza. “Mi boca es mi medida”, le dijo hace poco socarrona y descaradamente uno de estos comunicadores extorsionador y chantajista a una figura pública que, tras un ataque verbal bestial buscó un intermediario para limar asperezas y que cesaran los ataques. La “transacción”, según supe de una fuente primaria, se cerró con un pago en efectivo, en dólares, “y a mí que ese hijo de p… ni siquiera me mencione”, habría dicho el extorsionado a quien intermedió “la solución”. A quien no lo crea, y lo dude, le bastaría ver algunos espacios televisivos de “comentarios”, de esos que se producen cerca del mediodía y son retransmitidos cerca de la medianoche. Ahí defienden y elogian al que paga, atacan y difaman al que no paga, e insultan y se inventan cosas para quienes se busca que paguen. A todo esto, hay que agregar que existe una serie de funcionarios que permanentemente están temerosos de lo que dicen esos seudocomunicadores, y hasta tienen lobbistas que se acercan a estos para hacerles llegar sobrecitos y buscar silencio o halagos. Señores: La situación es grave y preocupante. Continuaré…