Ciudad de México.- México y toda América Latina entán de luto. Uno de sus hijos prodigio falleció hoy a los 85 años. Roberto Gómez Bolaños, uno de los más grandes y entrañables cómicos de su historia y de América Latina murió este viernes cerca de las 14:30 horas en Cancún, Quintana Roo. Sus familiares confirmaron la noticia, aunque no detallaron la causa de su deceso.
Su legado
Forbes calculó en 2012 que la transmisión de los 1,300 capítulos de Chespirito a lo largo de más de 20 años en que se produjo la serie generó ganancias a Televisa de alrededor de 1,700 millones de dólares. La revista especializada considera que cada episodio generó a la televisora 1.3 millones de dólares, pues es Televisa quien posee los derechos audiovisuales de la serie.
Además, Forbes afirma que Televisa Consummer Products, la división de la empresa encargada de la venta de licencias de la televisora al mundo, percibe beneficios anuales por más de 24 millones de dólares.
La fama de Chespirito alcanzó a 91 millones de televidentes en América Latina, además de otros países como Estados Unidos, Italia y Rusia, lo que lo ha mantenido por años como un producto muy rentable.
Cada transmisión de El Chavo del 8 tenía un promedio de 91 millones de espectadores.
Pero mientras Forbes dijo en 2012 que “El Chavo del 8 es una fuente de dinero inagotable” debido a la venta de videojuegos, muñecos, series animadas y más, Roberto Gómez Fernández, hijo de Chespirito, afirmó que “El Chavo no es millonario”.
“Los derechos de la serie son de Roberto Gómez Bolaños y se los licencia a Televisa, pero todo eso está muy lejos de ser cierto”, recalcó.
En su momento, Carlos Villagrán, el actor que dio vida al personaje de “Quico”, dijo a medios internacionales que Gómez Bolaños era millonario debido a que se quedó con las regalías de todos los personajes de la teleserie. Cabe recordar las largas fricciones por ese tema que sostuvo el afamado productor con María Antonieta de las Nieves, la intérprete de “La Chilindrina”.
Lo que es verdad es que sus creaciones televisivas, que incluso llegaron al teatro y al cine– seguirán generando regalías por muchos años, pero muy probablemente su mayor legado será su misma obra, vista hasta hoy en día por miles de personas en distintos países.