Corella, España.- Cerca de 300 personas se dieron cita en esta ciudad para celebrar el 9avo. aniversario consecutivos de la gran fiestas de los serie 81.
Fueron tres días de fiesta, confraternidad, y reencuentro, en el que muchos recorrieron largas distancias para no perderse de lo que se ha convertido en una tradición. Los más tempraneros comenzaron llegar el jueves. Tal fue el caso de Rosa Rodríguez y esposo, quienes dijeron presente desde Bergara, y Aileen Tejada, que hizo lo propio desde Valladolid.
El viernes fue el día de llegada de otros que venían de más lejos, como Nany Rodríguez y Clari Morales desde Alemania, y Alfonso Fernández y Wilfred Caraballo, que volaron sin escala desde Río San Juan para no perderse el evento. Días antes había llegado de Santo Domingo la joven Michelle Soto Bisonó.
El sábado comenzó el bembé con un reconocimiento al ayuntamiento de Corella, por su apoyo a estos encuentros. También se entregó una placa de agradecimiento a Alfonso Fernández, quien prometió apoyar años tras años esto intercambios.
La hora de la nostalgia concluyó con un aplauso para dos personas que por causas ajenas a su voluntad no pudieron asistir, la incansable Denny Alonso y el deportista Luis Hernandez, dos pilares de estos encuentros.
Concluido el acto protocolar vino el plato fuerte, el partido de softball entre el equipo de Los Unidos de Corella y los hijos del municipio que están dispersados por toda la geografía europea.
Todos los jugadores comenzaron con un entusiasmo como si se tratara de una copa mundial, aunque al final, el resultado de carreras ni a quien perteneció la victoria no interesó, lo importante era disfrutar como hermanos del partido, para luego entrarle a un rico moro de habichuelas, ensalada rusa, con acompañado de una variedad de carnes que agradó el paladar de todos los comensales. Clarro, fue una comida conversada, entre chistes, anécdotas y uno que poema o chisme familiar.
Ya en la noche le tocó el turno a la música, y quien más que la voz oficial de Río San Juan para a ritmo de salsa, merengue y bachata dijera esta es nuestra alegría; alguien a quien todos esperaba con ansias, nuestro Arismendy Paca, quien deleitó a los presentes con su talento y voz hasta bien entrada la madrugada.
El domingo, como ya es una tradición, era día de resaca y todos presentes disfrutaron del rico sancocho de recuperación. Pero no solo eso, también degustaron carne salada, chicharon de pollo y todo tipo de comida al más estilo dominicano donde el popular Freddy García y su bar Paradaise.
Ya al caer la tarde llegó el momento más difícil, la hora de la partida. Triste, pero con la satisfacción y la alegría de haber compartido entre hermanos, cada uno inició el regreso a sus respectivos lugares, Valencia, Madrid, Soria, Mondragón, Bergara, Tudela, Zaragoza, Cádiz, Vitoria, Alemania, Terrassa y Burgos, entre otros. La hora del adiós había llegado, pero no sin antes haberse prometido reencontrarse como hermanos el próximo año y mantener lo que ya es una tradición entre los serie 81.