Río San Juan.- Representantes de las diferentes juntas de vecinos de este municipio se reunieron con los dueños de restaurantes y las autoridades municipales y provinciales a fin de buscarle una solución al problema de los ruidos en el pueblo.
Ante el director provincial del COBA, la gobernadora provincial, al comandante policial y el alcalde municipal expusieron que llevan tiempo en un sobresalto que no le permite dormir por el alto volume de la música, ya sea en el parque, la laguna Gri-Grí y los negocios del área, al igual que el ruido y calibraje de la muchachada con sus motores.
Tras varios minutos de planteamientos y narrativa de la diferencia entre las epocas anteriores y estos tiempos, no se planteó una solución en específico, solo lo expresado por la gobernadora Correa, sobre los posibles escenarios a enfrentar.
Expresó la necesidad de que se busque un punto de convivencia entre los negocios del area y los vecinos que circundan, aclarando que la músa alta es prohibida dentro del pueblo.
Anunció que los negocios se pueden mantener con la música a un nivel moderado, y aplicando las leyes, “sin politiquería”. Para quienes las violen, dijo, habrá regimen de consecuencias.
Igualmente, planteó la necesidad de que el municipio haya un supervisor del COBA.
Finalmente, anunció que un equipo de miembros Digesett vigilará a los motoristas calibradores y que se le aplicará la ley.