Desde los años de 1983 al 1990, tenía una camioneta blanca en la cual realizaba el trabajo del traslado de pescados y mariscos de Río San Juan a Santiago, donde tenía la Pescadería Calamar. Esa guagua fue muy conocida, porque además de las labores comerciales que realizaba, se usaba en actividades muy diversas.
En ella tenía un potente equipo de música que servía para improvisar fiestas en cualquier momento y a cualquier hora del día. Fueron muchas las cervezas que se ingirieron y las declaraciones sentimentales que se realizaron alrededor de la guagua blanca de Luis Estrella, como se le llamaba.
A nivel deportivo era el trasporte al servicio de los viajes a pueblos cercanos y hasta lejanos, en todas las disciplinas deportivas. Lo mismo para acciones comunitarias y cualquier otro requerimiento que se presentase. En verdad podríamos decir que era un transporte a la disposición de quien la necesitara, sin importar su procedencia social ni económica.
Pero hay algunos acontecimientos que tuvieron una relevancia particular, los cuales voy a tocar al llegarme a la memoria en un momento que reflexiono sobre el pasado. Lo hago ya que nos muestran a un pueblo que a pesar de vivir con mucha armonía, alegría y solidaridad, no tenía el apoyo oficial para cuestiones mínimas.
Recuerdo el día que trajeron muerto a Héctor, un pescador hermano de Milagros Bonilla, Daysi, Zunilda, el cual era muy querido por su humildad y valores en toda la población. Como a las 11 pm estaba en compañía de Jinette Bonilla y Zunilda, cuando llegó al barco llamado La Navidad, capitaneado por Abraham Bonilla. Todos nos reunimos en la playa y cuando Abraham salió solo hizo una muestra con el dedo en el pescuezo y dijo: Héctor muerto.
Me tocó en la guagua blanca llevarlo al Hospital y luego salir para Gaspar Hernández a buscar a Mino Pérez, recorrido ida y vuelta que hice en 20 minutos. Fue una de las muertes más sentidas en el pueblo, porque Héctor, mi amigo, era una persona correcta, querido por todo el mundo.
En verdad esa muerte ocurrida a un joven pescador como ha pasado a través del tiempo por pescar en aguas profundas, ha llevado mucho luto inesperado a familias del municipio. Otros ha sobrevivido, aunque los efectos de la pesca con compresor a esa profundidad, ha dejado huellas en sus cuerpos, que jamás le han permitido realizar una vida normal.
En otra ocasión me tocó traer en la guagua blanca a la mamá de Santa De La Cruz, fallecida en Santiago. Todos sabemos lo complicado que es movilizar un muerto, tanto en costo como en burocracia. Lo montamos en la cama de la guagua, la tapamos con una lona y nos fuimos a Río San Juan acompañados de todos sus hijos.
En las fiestas patronales de Río San Juan en en el 1989, de la cual fui su presidente, organizamos varios maratones, uno de los cuales del área de las mujeres salió de la Cantera. Fue uno de los días que he recibido más tensión y estrés de mi vida.
Al poco tiempo de darse la orden de salida, Denny Alonzo una jovencita en esa época, pero que era una excelente atleta como todos los hermanos, sufrió un desmayo. De inmediato fue trasladada al Hospital, donde entró es estado de gravedad, por lo que el doctor Bolivar Alonzo recomendó sacarla de inmediato a San Francisco, porque de lo contrario podría morir en cualquier momento.
En ese tiempo no había ambulancia en el pueblo, por lo que preparamos la guagua blanca, la acostamos en un colchón con un tanque de oxígeno, acompañada por el doctor Bolivar Alonzo. Jalón y Chachá estuvieron en la conducción del vehículo.
Denny llegó con vida a San Francisco y allí se le prestaron los servicios médicos que salvaron su vida. Todos vivimos una gran incertidumbre, su familia, sus amigos y todo el pueblo. De nuevo la guagua blanca jugó su rol como el transporte del pueblo.
Podría durar horas narrando todo lo que realizábamos en esa época, de 1983 al 1990, con la guagua blanca, cuya función principal era trasladar los pescados y mariscos a Santiago, pero que jugó un rol amplio y diversificado en Río San Juan.
Por eso siempre recuerdo de voz de muchas personas y en múltiples ocasiones la frase: LA GUAGUA BLANCA DE LUIS ESTRELLA.