Las intenciones de crear un reperpero de opiniones en todo el territorio dominicano con el sometimiento ante la Cámara Diputados del proyecto que ordenaría la construcción de un muro en la línea fronteriza con Haití, consiguió su objetivo.
El legislador de la Fuerza Nacional Progresista,Vinicio Castillo Semán, tenía que presentar sus credenciales. Y qué mejor manera que soplar un disparate que limpie el polvo y estampe su apellido en la recién entregada butaca en la cámara legislativa.
¿O qué esperaban. Que sometiera un proyecto que obligara al gobierno construir viviendas a los marginados de Santo Domingo? No, esto no sería mediático. Su presencia pasaría inadvertida.
Todo el que tiene dos dedos de frente, o menos, sabe que su idea es absurda o utópica. Él lo sabe, pero esto nada importa. Lo que importa es que se sepa que hay un “Vincho” en el hemiciclo. Lo logró.