Santo Domingo.- La sala Ramón Oviedo de la Secretaría de Cultura ha servido de escenario para la más reciente exposición del arquitecto y artista plástico riosanjuanense Persio Checo, titulada "De lo Mágico-Telúrico".
La muestra, que inició el pasado 8 de octubre y continuará el hasta 3 de noviembre, ha sido una de las más visitadas por personalidades del arte plástico y público en general.
El escritor Avelino Stanley y el poeta Mateo Morrison estuvieron presentes el día de apertura de la exposición. El primero dirigió unas palabras al público asistente resaltando las cualidades del artista, confesándose un amante y seguidor de su arte hasta tener en su propia casa algunos cuadros de Persio.
Por su parte, el artista plástico y director de esta acogedora sala, Gabino Rosario, leyó algunos fragmentos de lo escrito por él en el folleto sobre la exposición.
“Es importante destacar que la inagotable avidez de experiencias y conocimientos han llevado a Persio por un amplio periplo que va desde Río San Juan hacia la Escuela Nacional de Bellas Artes, a la carrera de arquitectura en la UASD, a la Escuela de Artes Visuales de Río de Janeiro-Brasil, hasta sus recientes Talleres de Arte Actual en el círculo de Bellas Artes de Madrid-España”, dijo Rosario.
Siguió diciendo que, “Todo esto sin eludir un vínculo entrañable con su tierra, de la que incorpora en sus obras, claras alusiones simbólicas para hacer de ellas alegorías a la naturaleza vegetal, marina, y sobretodo animal (evidente en su apego a la temática de lo vacuno)”.
“En lo que respecta a esta muestra “De lo Mágico-Telúrico”, Persio hace acopio de todos sus recursos plásticos e iconográficos para ofrecernos una colección de pinturas en grandes dimensiones, en las que flota una magia vivificante que confiere vitalidad y presencia a unas formulaciones vinculadas a ritualidades en la que cierto antropomorfismo y reiterado uso del cráneo vacuno (objeto propiciatorio o fetiche) nos remite a prácticas ancestrales, que reafirman la propensión humana a buscar nociones trascendentales mas allá del dominio de la realidad y de prácticas espirituales convencionales”, fueron las palabras de Rosario.
Muchas personas estuvieron acompañando a Persio en esta exposición, incluida una delegación de su lar nativo que fue exclusivamente para la ocasión; también muchos compueblanos residentes en Santo Domingo y otras personalidades invitadas.
Diecinueve cuadros en grandes formatos diseminados por toda la galería daban un aspecto de sofisticación al ambiente donde una guitarra muy bien tocada servía de melopea para las libaciones de vino con lo que fueron agasajados los concurrentes, y al filo de la medianoche ya muchos de estos cuadros habían cambiado de dueño.
Con esta Persio se anota otro logro más después de su reciente exposición en Segovia-España, lo cual viene a acrecentar su bien ganada fama y a realzar el nombre de Río San Juan en todos los ámbitos, sobre todo en lo cultural.