
J.C. Malone, periodista dominicano residente en Nueva York.
El consumo de cocaína aumenta, también la producción de opio en Afganistán y la legalización de la marihuana. El narcotráfico devastó sociedades latinoamericanas, convirtiéndolas en paraísos del crimen organizado; alterando la economía, el balance del poder político y la seguridad pública.
Colombia sigue siendo el principal productor de cocaína y ahora heroína. Directamente al norte está la Isla de Santo Domingo, compartida por Haití y República Dominicana, el almacén mundial de cocaína.
Los dominicanos han desmantelado laboratorios de producción de cocaína, eso significa que otros aún funcionan.
La violencia asociada al narcotráfico corroe los pueblos de la costa sur dominicana, la ruta de entrada y salida de las drogas. En Honduras destruyó la seguridad pública, esa nación es la capital mundial del homicidio, ahí matan más personas que en ningún otro lugar del planeta.
México, la entrada al gran mercado estadounidense, se desangra y desintegra por efectos del narcotráfico.
Hay regiones completas controladas por narcotraficantes y surguieron grupos para militares para la “seguridad pública”, que pueden ser el inicio de algo mucho peor.
En la “Guerra Contra las Drogas” solo gana la industria armamentista, vendiéndole armas a narcotraficantes y gobiernos.
En la “Guerra Contra las Drogas” los estadounidenses viven arrebatados y su industria armamentista gana miles de millones anuales, mientras latinoamérica se desangra en una lucha inútil. Cada año mata más de 60 mil latinoamericnaos, aquí tiene encarcelados a casi dos millones de latinos y afroamericanos.
Según la ONU desperdiciamos $100 mil millones anuales “guerreando contra las drogas”; matan decenas de miles y destruyen sociedades sin impedir que millones de estadounidenses se arrebaten.
Los líderes latinoamericanos deben aliarse con politicos estadounidenses que exploran legalización y otras alternativas, para detener esta masacre.
Mientras más tarden en establecer esas alianzas, más personas morirán y más sociedades nuestras se desintegrarán.