Desde hace unos meses hemos venido escuchando el tema de la reelección, el cual a partir de la decisión tomada por el Comité Político del PLD, se ha agudizado más, abriendo nuevos debates y críticas, tanto en favor como en contra.
Si bien sabemos la reelección presidencial es un fenómeno electoral por medio del cual el pueblo elige nuevamente al presidente para que gobierne por un periodo igual al que fue elegido anteriormente, este acontecimiento se da en regímenes presidenciales en donde el presidente cumple el rol de jefe de estado, del gobierno y suprema autoridad administrativa.
Es de nuestro conocimiento que la reelección presidencial consecutiva fue prohibida en nuestro país, República Dominicana, tras una reforma constitucional en 1994 impulsada por el entonces líder de la oposición José Francisco Peña Gómez. La misma sin embargo fue reintegrada mediante otra reforma propiciada por en ese entonces presidente Hipólito Mejía en el año 2002: nueva vez fue prohibida en el 2010, pero se abrió la posibilidad de que un presidente solo pueda optar por un segundo período pasando un mandato de intermedio.
Somos el país latinoamericano que mayor cantidad de veces en menos cantidad de años, ha reformado su Constitución, la cual ha tenido 39 modificaciones en 166 años, desde 1844 al 2010, de las cuales más de 20 ocasiones han girado en torno al tema de la reelección presidencial.
Ahora por nueva vez se va a introducir un proyecto para modificar la Constitución de Republica al fin de restablecer la reelección presidencial; tomando en cuenta los altos niveles de popularidad y aceptación que goza la actual gestión del Presidente Danilo Medina, el cual ha hecho lo que nunca se ha hecho en la República Dominicana. La cual aparece expresada en todos los estudios de opinión que últimamente han sido realizados.
Todo en la vida tiene consecuencias buenas y malas, dependiendo de los intereses que se afectan y la orilla desde la que se mire y analice el hecho. Las acciones humanas también tienen un laso que mirar al sol y otro a la luna: Un lado oscuro, un lado claro. En esta ocasión nos vamos a central en el lado positivo de la reelección de nuestro presidente.
Lo bueno de que Danilo sea reelegido, es que el presidente podrá culminar todas las iniciativas de su gobierno que aún están inconclusas. Justo es reconocer que hay programas excelentes, que por falta de tiempo no han podido concretarse; con cuatro años más por delante a lo mejor la tan mentada revolución eléctrica, arranca de una buena vez.
Los procesos de cambio para bien de nuestro país, seguirán su curso normal, sin sufrir alteraciones por un cambio de gobierno, Danilo seguiría visitando de manera sorpresiva las distintas comunidades de nuestro país, que necesitan de su rápida intervención, hablando con sus moradores y ofreciéndoles inmediata soluciones.
El debate político estará más álgido e interesante que nunca, Danilo seguirá gobernando más para la gente, corrigiendo lo que está mal, continuando y ampliando lo que va bien y sobre todo haciendo lo que nunca se ha hecho.
En fin hay mucha tela para cortar al momento de hablar de apoyar la reelección presidencial, solo decir que el pueblo es quien pide a gritos a ese hombre que ha venido a cambiar el rostro de cada Dominicano, un ser que luchó para llegar a ser presidente para ayudar a los demás, no importando las derrotas, pues la convertía en nuevas oportunidades para prepararse y conquistar el corazón de todos.