PUERTO PRINCIPE.- Ni la renuncia del Primer Ministro Ariel Henry, ni la resolución de este lunes en la reunion de la Comunidad del Caribe (Caricom) han logrado aplacar el caos en el que está sumido Haití.
Y es que este martes, la coalición de pandillas denominada Viv Ansanm reaccinó a esos acontecimientos rechazando cualquier pacto acordado fuera de Haití, obligando a Kenia a suspender el envío de policías a Haití, previsto como parte de una misión internacional respaldada por la ONU.
«Corresponde al pueblo haitiano decidir quién dirigirá el país», expresó a la prensa el jefe de Viv Ansanm, Jimmy Chérisier, alias Barbecue.
La agrupación armada, responsible de la vorágine de violencia por la que atraviesa el pueblo haitiano, restó importancia a las conversaciones Caricom y la supervisión de Estados Unidos, y dijo que no reconocerá a ningún gobierno que surja de ese tipo de reunión.
El lunes fue realizada en Jamaica un cónclave de la Caricom para lograr una transición ordenada y restaurar la autoridad en Haití, la cual mantuvo a la expectativa a todos los sectores del país caribeño.
En Kenia, Korir Sing’oei, secretario principal de Relaciones Exteriores del país africano, declaró que se produjo un «cambio fundamental en las circunstancias como consecuencia de la ruptura total de la ley y el orden y la posterior dimisión Henry.
«Sin una administración política en Haití, no hay un ancla sobre la cual pueda descansar un despliegue policial. El Gobierno de Kenia esperará la instalación de una nueva autoridad constitucional”, dijo.