Si de comer con cerrados se trata (langosta a la Termidor…filete Mignón…Pollo a la pimienta Dijón…filete a la Chautebriand); si probar con fruición inigualable un bocatto di cardenale se pretende (cordero al horno…rabo encendido…paella a la valenciana); si se quiere llegar a los niveles supremos del placer gastronómico (raviolis tres quesos…bistec a la milanesa…espagueti a la carbonara); si lo que se busca es un manjar concebido para dioses (perdiz al vino…pescado al limón…mole poblano)…No hay que darle más vueltas al asunto: si lo que se desea es tener una experiencia estética que nada le sea equiparable, ¡un buen pan de agua con aguacate no tiene madre!



