Más de 60 años de lucha innegociable por las más caras aspiraciones de este pueblo. Más de 60 años de fidelidad a sus ideas innegociablemente marxistas. Más de 60 años de concurrir a debates politicos (incluso como diputado), sin denostar a sus adversarios ideológicos. Más de 60 años de promover la unidad de la Izquierda como premisa de un triunfo todavía pendiente. Más de 60 años de mostrar elevados valores morales. Más de 60 años, pues, de una vida ciudadana ejemplar, han  hecho a Fidelio Despradel merecedor de un honroso reconocimiento de la Cámara de Diputados (que, por lo excepcional de su significado, honra a la Cámara misma).