NUEVA YORK.- El expresidente Donald Trump se declaró inocente este martes de 34 cargos por delitos graves de falsificación de registros comerciales vinculados al pago de dinero secreto de Stormy Daniels.
Trump, de 76 años, fue fotografiado con los hombros ligeramente encorvados mientras tomaba asiento en la mesa de los acusados en la Corte Suprema de Manhattan antes de su histórica lectura de cargos.
Anteriormente, el presidente número 45 levantó el puño de manera desafiante cuando salió de su residencia en la Torre Trump en Midtown poco después de la 1 p.m. antes de que lo escoltaran al centro de la ciudad en una caravana, en camino a convertirse en el primer presidente de los Estados Unidos en ser procesado penalmente.
“Dirigiéndose al Bajo Manhattan, el Palacio de Justicia. Parece tan SURREAL – WOW, me van a ARRESTAR. No puedo creer que esto esté sucediendo en Estados Unidos. ¡MAGA!” publicó Trunp en la Truth Social momentos antes de entregarse.
Flanqueado por el Servicio Secreto, Trump, vestido con su característico traje oscuro y corbata roja, saludó con la mano antes de entrar a la oficina del fiscal del distrito para entregarse.
A diferencia de la mayoría de los acusados, Trump fue fichado en el juzgado, y no en una comisaría de policía. Una vez dentro, dijeron las fuentes a The Post, se tomaron las huellas dactilares del expresidente antes de ingresar a la sala del tribunal a las 2:30 p.m.
Su cita en la corte
Contrario al viaje de Trump al juzgado, que fue seguido por numerosos helicópteros y transmitido en vivo por televisión por cable, su audiencia no fue televisada a las masas, por dictamen del juez del caso.
Sin embargo, el juez Juan Merchan dictaminó que un puñado de fotógrafos podía tomar fotos del proceso, a pesar de que los abogados de Trump solicitaron que se prohibieran las cámaras por completo.
Fuera de la corte, la rendición de Trump creó un espectáculo, incluso para sus estándares.
Cientos de manifestantes, medios de comunicación y algunos políticos, incluidos los representantes Marjorie Taylor Greene (R-Ga.) y George Santos (R-NY), invadieron las calles alrededor del juzgado.