A Anthony
Ahora nos sorprendes con tu última chanza.
Te haces el muerto sabiendo que vives en cada canción que escribiste para amar y odiar, para reír y sufrir, para pensar y olvidar.
No, "Loco", es un sueño más para ti.
Despiertas en cada pueblo que te ha hecho tuyo, que tararea tus canciones y atenciona tus pláticas llenas de ratos vividos a tu estilo vagabundo y
nostálgico.
"Señora tristeza", se equivoca usted. A un artista como éste no se le llora; se le agradece su aporte con respeto y orgullo, porque nos puso a latir de emoción el "Corazón mágico ".
Sabemos que "Estás donde no estás", que no te has ido.
"Si un día te sientes sola", un artista como él te acompañará y "Si usted supiera, señora", se atrevería a alegrarla por siempre. Ponga su "Imaginación" porque "en el tren que yo viajaba conocí a una chica triste" que lo fue hasta que lo conoció.
"Si entendieras" lo que se te quiere il, "Te vas a quedar", pues aunque quieras "Morir de amor", "Lo que te espera" es un pueblo que te aprecia y respeta desde la A hasta "La Z".
No hay porqué guardarte luto, si el negro fue parte de tu vida, ni pensar que los búhos, a los que amaste con vehemencia, son aves de mal agüero. Ellos te proporcionaron la dicha de alegrarte.
"La distancia", la cruel distancia, no te separará de nosotros, tus amigos y compañeros del Show del Mediodía y del Show de Luisito y Anthony.
"Te invito" a que nos repita, como siempre, que es mejor "Comprenderse más y amarse menos", porque yo, te lo juro, "Loco", estoy "Confundido".
Beberé de los Ríos diáfanos de tu recuerdo y saciaré la sed de recordar tus
enseñanzas, a tu modo, y dejarme llevar por las presurosas y cantarinas aguas hasta desembocar en el mar de tus travesuras.
Aquellos, que alejándose de la realidad "en una nave gris de hipocresía", enarbolaron la mezquindad para impedir tu reconocimiento en la Cámara Baja, alzaron el premio más deseado para un artista, que es la admiración de tanta gente que logró la conquista de un amor con tus inigualables canciones, ésas, que sonarán por siempre en tu patria, a la que nunca renunciaste.
A ellos les quedará una mancha en el centro de su alma, si es que tienen alma.
"Si entendieran que el tiempo no podrá borrarte".
Ironía del destino: asistí a tu último y más concurrido concierto, rodeado de flores, vi miles de personas llegar, de todas las edades, y nadie aplaudió tu silencio. Cantó tu legado, el que jamás apagará su voz.
Aunque prometí no llorarte, sino, en cambio, recordarte con alegría, he flanqueado, "Gordo", pues mis lágrimas no resisten esta "Fatalidad".
¡Vivirás para siempre, "Viejo amigo"!