Esta época de navidad es propicia para reflexionar sobre múltiples aspectos de la vida, pero entiendo que un tema apropiado para la situación, es el relativo a la organización financiera personal, el cual mal manejado puede afectarnos de una manera negativa en nuestro futuro y el de nuestra familia, así como manejado correctamente, lo haría de manera positiva.
Todo aquel que se interese por crear un régimen personal de organización financiera, es fundamental que se inicie leyendo el libro de George S. Clason: "El hombre más rico de Babilonia"." El cual muestra la clave para adquirir, mantener y reproducir dinero, empleando parábolas e historias babilónicas que muestran como la antigua civilización logró acumular riquezas y un desarrollo sin comparación para la época".
Este libro de manera genial nos trata de educar en como tener la capacidad de ahorrar un mínimo de un 10% de lo que ganamos; y al mismo tiempo teniendo la visión de invertir ese ahorro, en una actividad que produzca mayores ganancias financieras. Ahorrar no para gastar en algo improductivo, sino en una operación productiva y activa.
Luego George Hill escribió "El hombre más rico de Babilonia para nuestra época ". En esta obra Hill, aunque conserva el espíritu y los excelentes consejos del texto anterior, agrega nuevos consejos sobre como invertir y hacer dinero, usando un lenguaje actualizado, presentando historias modernas con mayor relevancia para nuestros días.
Estas dos obras son importantes para empezar a crear conciencia sobre la necesidad del ahorro, pues con un lenguaje simple y varios ejemplos, nos van enseñando que cuando se tiene visión y se actúa con firmeza, disciplina y planificación es perfectamente posible lograr las metas que establezcamos en relación a la organización financiera.
Mi experiencia me dice que lo fundamental para el crecimiento económico es tener los pies sobre la tierra, vivir de acuerdo a las posibilidades reales, nunca gastando más de lo que producimos, organizando un presupuesto personal financiero, donde nunca podemos excedernos en los gastos en relación a nuestras entradas.
Para lograr esta situación simplemente debemos vivir mirando hacia el interior, sin dejarnos arrastrar por la cháchara social, por el consumismo superfluo y la vida superficial, haciendo sólo lo que nuestra realidad nos permite hacer, viviendo la vida a nuestra manera, siendo auténticos y teniendo criterio propio. Disfrutando al máximo la vida, pero sin excesos ni vanidad.
Alejandro Dumas decía " No estimes el dinero en más ni menos de lo que vale, porque es un buen siervo y un mal amo".
Mi consejo en esta navidad es el de hacer conciencia sobre la importancia del ahorro, para vivir de una manera más organizada y disfrutar la vida con mayor plenitud.