Sin lugar a dudas, todo parece indicar que el actual senador Arístides Victoria Yeb, sin mayores dificultades repetirá en esa posición, por dos razones fundamentales, siendo la primera la fortaleza de los candidatos a diputados, y la segunda, la indiscutible unificación de la estructura partidaria alrededor de la boleta congresual.
Los actuales diputados José Luis Cosme y Pedrito Verás tienen sus votos cautivos, a quienes se sumaría el diputado del PRD Salomón García, quien goza de una gran popularidad en la provincia y vendría a hacer un aporte de inconmensurable valor a la boleta congresual, lo que con los aportes directos que haga el actual senador y los votos de la estructura partidaria, nos dirigen hacia un proyecto invencible.
En estos momentos los indicadores electorales nos reflejan que existe una unidad monolítica en el partido en torno a Arístides Victoria y el proyecto senatorial, no vislumbrándose la menor brecha por donde puedan escurrirse algunos votos disgustados o disidentes. En verdad que a nivel partidario no se lograban tales objetivos desde hace algún tiempo, por lo que las posibilidades de obtener un triunfo arrollador son indiscutibles.
Pero al mismo tiempo debemos comprender que no debemos fiarnos del triunfalismo, que hay que trabajar sin descanso ni pausa, para que el triunfo sea contundente y el presidente Danilo Medina logre la votación más alta en la historia de la provincia, la cual tenemos la seguridad que sobrepasará el 60% del electorado.
Desde mi punto de vista, las boletas municipales no tienen la misma perspectivas, lucen indefinidas, algunas con cierta fortaleza y otras con mucha debilidad, pero ese será tema de otro comentario.
