El tiempo siempre descubre a los mentirosos.
Caminar hoy por las calles y barrios de Río San Juan, después de varios días de lluvia, es volver al pasado y descubrir que en los pasados cuatros años, las autoridades municipales, nos mintieron, nos engañaron y nos robaron.
Las inundaciones del pueblo y sus barrios no sólo se resuelven recogiendo basuras y plásticos, también hay que construir más filtrantes, más canaletas, más desagües, más cantarillados.
Cuatro años haciendo lo mismo y ahora tenemos los mismos resultados: calles intransitables, casas de familias inundadas, pérdidas que nunca serán recuperadas porque a nadie van a responsabilizar por estos daños.
Recoger la basura y limpiar los filtrantes es una obligación, pero hacer obras nuevas para evitar en varios lugares y controlar en otros las inundaciones es una necesidad.
Busquen nuevos ingenieros para resolver este problema, no busquen amigos.
En Río San Juan hay maestros constructores con más capacidad que los ingenieros que han pasado por ese ayuntamiento.
Si los mismos siguen haciendo lo mismo, tendremos los mismos resultados.